...debatir es público, enojarse es privado... Debatir y boxear son un gran trabajo mental, es…
“De lo prosaico a lo sublime”
…un desvío hacia un nuevo fin…
“No hay mucha diferencia entre el boxeo profesional y la pintura. Es solo cuestión de tiempo. Cuando era joven podía expresarme con los puños. La expresión física pertenece a la juventud. Luego pasan los años y encontré el arte y la expresión en los colores”. -Mickey Walker
Podría escribir a razón de esta cita sobre el desvío de la meta que propone la sublimación como mecanismo de defensa, de aquella vía de escape que permite cumplir una exigencia sin dar lugar a la represión y de como la pulsión se lanza a otra meta.
Esta vez prefiero escribir que el arte rinde tributos a las fuerzas humanas más hondas y socialmente consideradas salvajes, carnales, sexuales, violentas y terrenales fuerzas que nos gobiernan. Quizá el artista y el boxeador están cerca de sus pasiones “mundanas” y las aceptan, mientras que el resto se llena de temores, culpas y contradicciones, temiendo la intensidad de las fuerzas internas que en realidad lo gobiernan.
“De lo prosaico a lo sublime”